Esto ha sido un no parar, además de que hacía mil que no recibía un encargo, que hacía mucho que no hacía un retrato, que tengo otros dos proyectos en proceso al mismo tiempo, sin horas en el día por que gracias a Dios (llámalo Dios o llámalo insistencia hasta que lo he conseguido) estoy trabajando (aunque sea temporal T_T ) y que se me estropeó a última hora por el trajín del viaje, pero lo he podido arreglar y así ha quedado.
Una compañera me pidió el retrato de su perrito que había muerto este año de viejito. Ya sé lo que es pasar por eso, también perdí a mi Gordi, como recordaréis. Así que esto se hace con cariño.
1 comentario:
Es un homenaje precioso, Loli. Precioso
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